RONALD ARONSON
Hasta ahora ha resultado imposible leer la historia completa de la relación entre Albert Camus y Jean-Paul Sartre. Su dramática ruptura en los momentos más críticos de la guerra fría, como el propio conflicto en sí mismo, exigió, a aquellos atrapados en sus redes, tomar partido antes que valorar su trágica complejidad. Albert Camus y Jean-Paul Sartre se conocieron en 1943, durante la ocupación alemana de Francia. Aliados intelectuales, así como políticos, fueron pronto famosos tras la liberación de París. Bien como dramaturgos, novelistas, filósofos, periodistas o editores, ambos parecían estar en todas partes y al mando de todos los medios de comunicación en la Francia de la posguerra. Sin embargo, las tensiones entre el Este y Occidente introducirían una gran tirantez en su amistad conforme evolucionaban en direcciones opuestas y comenzaban a discrepar sobre filosofía, las responsabilidades de los intelectuales y qué clase de cambios políticos eran necesarios o posibles. Sartre abrazó la violencia como un camino para el cambio y Camus se opuso ásperamente, dando lugar a una amarga y muy pública disputa en 1952. Nunca se volvieron a hablar, aunque continuaron atacándose indirectamente hasta la muerte de Camus en 1960. Mediante la combinación de la biografía y la historia intelectual, la pasión filosófica y la política, Camus y Sartre fascinará a todo aquel interesado en estos grandes escritores o en los temas histórico-mundiales que los separaron.